Si estás en tratamiento del acné, deberías tener en cuenta que algunas terapias producen fotosensibilidad.
Te damos algunos consejos para evitar las reacciones cutáneas frente al sol.
Algunos grupos de fármacos utilizados para el tratamiento del acné, como algunos antibióticos orales (doxiciclina o minociclina, etc.) o los corticoides sistémicos producen un tipo de fotosensibilidad química que hace que la piel sea más sensible a los efectos nocivos de la radiación solar.
Entre sus síntomas más comunes, dolor, enrojecimiento, inflamación y en algunos casos una decoloración marrón o azul grisácea en las áreas de la piel que han estado expuestas a la luz solar. Síntomas similares a los de una quemadura solar.
Recuerda que el sol puede ser beneficioso para el acné, pero si estás recibiendo un tratamiento consulta con tu dermatólogo/a si puedes tomarlo y en ese caso toma las precauciones necesarias. Utiliza protección solar adecuada a tu fototipo y procura que sea oil free.
Si quieres evitar el efecto rebote tras el verano, mantén las rutinas de higiene y cuidado de la piel en vacaciones. Puedes ampliar la información en este artículo de nuestro blog.